lunes, 10 de agosto de 2009

Una imagen vital es aquella que propone un juego constante de energías aunque quede fijada para siempre en el tiempo de la tela. Y si bien figuración, imagen y arte pictórico suelen representar términos intercambiables de una misma serie, en la mancha late el impulso creador: la fuerza que lo anima. Y así curiosidad, búsqueda e invención desafían al ojo domesticado a través del color y sus silencios (el lenguaje de espacio), recordándole que fueron las manchas las que, cuando todavía no sabíamos hablar nos enseñaron a decir, a jugar, a pintar.

Jorge Chiesa
Mar del Plata, 2011